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​​Enfoque internacional

En esta sección se ilustra sobre los conceptos y análisis más relevantes que en documentos sobre transición energética vienen exponiendo los principales organismos internacionales, como: WEF, IRENA, Banco Mundial, CEPAL y BID, con el propósito de identificar la percepción y prospectiva que acerca de este proceso se tiene a nivel mundial y en América Latina y el Caribe.

Se cierra este aparte internacional con el enfoque que sobre esta temática expone BP plc (BP), anteriormente British Petroleum, la multinacional de la energía y referente mundial para el sector por sus continuos y completos informes energéticos, en su reporte Energy Outlook 2022 Edition, con el que examina las incertidumbres más relevantes que rodean la transición energética.

WEF: Índice de transición energética 2021 
El Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés), presentó el reporte denominado “Fostering Effective Energy Transition 2021”, en el que se publicó el Índice de Transición Energética (ETI, por su sigla en inglés). Este índice compara el desempeño de los sistemas energéticos de 115 países en dos grandes áreas: rendimiento del sistema y preparación para la transición.

WEF desarrolló este índice en 2018 con el fin de medir el progreso de la transición energética nacional, comparando 118 países (para el ETI 2021 se contó con 115 países) en función del desempeño de su sistema energético actual y su preparación para la transición en curso. Lo anterior, se cuantifica mediante 39 indicadores utilizados para calificar a los países en una escala de 0 a 100.  



ETI 2021 está encabezado por tres países que forman parte de la región geográfico-cultural denominada países nórdicos, la que lidera el camino hacia la transición energética en la Unión Europea. Suecia, país que lidera el ETI 2021, está al frente en el uso de energías renovables, que representan un 60 % en su consumo final bruto de energía, cifras a 2020.



IRENA: TRANSICIÓN ENERGÉTICA MUNDIAL Y SU CAMINO HACIA EL OBJETIVO, 1,5 °C


La Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA, por su sigla en inglés) es una organización mundial constituida en 2009 en Masdar City-Abu Dhabi (Emiratos Árabes) con el acuerdo de 75 países. A 2021, esta agencia internacional cuenta con 162 países miembros y funge como observador oficial de la ONU.

Esta organización sirve como plataforma principal para la cooperación internacional, y es un centro de excelencia, un repositorio de políticas, tecnología,conocimientos financieros y de recursos, y un impulsor de la acción sobre el terreno para promover la transformación del sistema energético mundial. IRENA incentiva la adopción y el uso sostenible de todas las formas de energía renovable, en búsqueda del desarrollo sostenible, acceso a energía, seguridad energética y crecimiento económico bajo en carbono y prosperidad.
Tomado de: <https://www.irena.org/>.



Para IRENA, tal como lo enmarca en su último reporte: “World Energy Transitions Outlook 2022 (WETO), 1,5 °C pathway”, dado el ritmo actual y el alcance de la transición energética, todo lo que no sea radical e inmediato disminuirá y eliminará la posibilidad de: i) limitar abajo de 1,5 °C el calentamiento global, ii) permanecer en 1,5 °C o, incluso, iii) alcanzar una senda de 2 °C.

El aumento de los compromisos netos cero de muchos países muestra que se comprende la gravedad y complejidad de la situación; sin embargo, una cosa es el conocer y otra es el actuar.

Según Francesco La Camera, su director-general, WETO 2022 muestra que: “… el progreso en todos los usos de la energía ha sido muy inadecuado. Las ‘contribuciones nacionales determinadas mejoradas’ y los compromisos asumidos en la COP26 muestran una tendencia prometedora, pero aún no alcanzan lo que se requiere”.

Según WETO 2022, el escenario de 1,5°C requerirá una inversión de US$ 5,7 billones por año hasta 2030, incluyendo una redirección de inversiones de US$ 0,7 billones por año de combustibles fósiles a las tecnologías de transición energética. 




BANCO MUNDIAL: MEDIDAS QUE IMPULSAN LA TRANSICIÓN HACIA UNA ENERGÍA LIMPIA​


El Banco Mundial (BM) publicó en su página web, el 24 de mayo de 2021, el artículo: “Transiciones fundamentales en la lucha contra el cambio climático”, en el cual expone varias medidas y premisas sobre las cuales fundamenta su visión de cómo desarrollar y sobre qué pilares sustentar la transición energética que se requiere implementar a nivel mundial para afrontar los desafíos que genera la problemática del calentamiento global y sus consecuencias en el cambio climático. Entre las más relevantes medidas y premisas expuestas en el documento se encuentran:


• “El Grupo Banco Mundial está aumentando su financiamiento para ayudar a los países a abordar la pandemia del Covid-19 y el cambio climático, porque un futuro sostenible depende de las decisiones que los países tomen hoy”.


Un ejemplo de lo anterior es India, país próximo a convertirse en el más poblado del mundo, donde el BM respaldó la construcción del proyecto de energía solar de gran magnitud en Rewa, que con 750 MW es uno de los más grandes del mundo, dio el impulso inicial para un mercado de paneles solares para techo y apoyó el Programa de Fomento de la Eficiencia Energética, mediante el cual se distribuyeron millones de bombillas y tubos LED.

• “Para sanear los sistemas energéticos, será importante impulsar medidas en diversos frentes, entre otros, las energías renovables, la eficiencia energética y la transición justa para eliminar el uso del carbón”.​


Con el fin de impulsar la transición hacia la energía limpia, será necesario poner en marcha medidas simultáneas en diversas fuentes:

• Descarbonizar el sector energético ampliando el apoyo a las energías renovables. Para Rohit Khanna, gerente del Programa de Asistencia para la Gestión del Sector de Energía (ESMAP): “La descarbonización del sector energético será una realidad; aunque es cierto que no se está avanzando lo suficientemente rápido, el camino a seguir es muy claro, y es un hecho que durante nuestras vidas seremos testigos de la producción de electricidad con cero emisiones de carbono”.

• Mejorar la fiabilidad del suministro de electricidad en un mundo donde los cortes de energía cuestan US$ 185.000 MM en los países de ingresos medio y bajo.

• Apoyar a los países para que puedan emprender una transición justa hacia la eliminación del uso del carbón.

• Aumentar la escala de la eficiencia energética. 

• Eliminar los subsidios a los combustibles fósiles, sin dejar de ampliar el acceso a la energía.

• “Con el fin de mitigar la inseguridad alimentaria y proteger los bosques, será necesario implementar la agricultura climáticamente inteligente y las soluciones basadas en la naturaleza”.

• Transformar el transporte. Actualmente, este representa un 25 % de las emisiones de GEI derivadas del consumo energético mundial y la tendencia no es alentadora; para 2030 se pronostica que el tráfico de pasajeros superará los 80 billones de pasajeros-kilómetros, un aumento de 50 % con respecto a 2015. 

Tomado de: <https://www.bancomundial.org/es/news/feature/ 2021/ 05/24/Transition-at the-heart-of the-climate-challenger.print>.​


CEPAL: “UNA TRANSICIÓN ENERGÉTICA JUSTA EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE”





La Comisión Económica para América Latina y​ el Caribe (CEPAL), adscrita a la ONU, publicó en 2021 el reporte denominado: “Hacia una planificación sostenible para una transición energética justa en América Latina y el Caribe: análisis de mejores prácticas en países seleccionados”, el cual se enmarca en las actividades del ‘Foro Técnico Regional de Planificadores Energéticos’,  coorganizado por la CEPAL y apoyado por el programa GET.transform, que cuenta con el aval de la UE en su conjunto, Alemania, Austria, Países Bajos y Suecia. Surge a modo de resumir hallazgos relevantes de la investigación de documentación y realización de entrevistas a representantes de instituciones de planificación de siete países seleccionados como representativos de la región.

Objetivos y pilares







“El rol de las ER tiene un alto potencial para retomar el crecimiento económico sostenible y contribuir a una recuperación pos-Covid-19. Para avanzar en ello, se requiere de un entorno que facilite el desarrollo de la generación renovable. En este sentido, es nece​sario que la región sea capaz de atraer inversión mediante el desarrollo de un entorno de negocios apto, donde los mecanismos de mercado y remuneración adecuados juegan un papel fundamental para tener un mercado competitivo para las ER”.





BID: EL PAPEL DE LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en su propósito de financiar proyectos viables de desarrollo económico y social y de promover la integración en América Latina y el Caribe (AL y C), publicó, en abril de 2021, el documento: “El papel de la transición energética en la recuperación sostenible de América Latina y el Caribe”.

Como en el resto del mundo, las economías de la región sufrieron un gran impacto por la pandemia del Covid-19. Ante este escenario de severa recesión, el BID, a través de este documento, sugiere a los gobiernos diseñar medidas que promuevan la inversión pública, faciliten la inversión privada e impulsen la recuperación económica y la creación de empleo.

Para el BID, la visión de largo plazo que se incluya en los planes de reactivación debe ser consistente con las estrategias de transición energética de los países, promover inversiones con mayor potencial para crear empleos y reducir las emisiones de GEI.

Algunas políticas identificadas por el BID para apoyar la reactivación económica y crear empleos que permitan una transición energética hacia una economía más descarbonizada, descentralizada y digitalizada, son descritas a continuación:

• Subastas de energías renovables. AL y C fue pionera en realizar subastas para la compra de energía. Estas son una herramienta eficaz y eficiente para revelar precios bajo asimetría de información, y pueden adaptarse a diferentes diseños de mercado.

• Modernización de plantas hidroeléctricas. Dado que estas garantizan la seguridad de los sistemas eléctricos, cuya participación de recursos renovables intermitentes ha crecido, es fundamental modernizar el parque actual rehabilitando y renovando sistemas, equipos e infraestructura civil.

• Mayor eficiencia energética.

• Incentivo al almacenamiento. En la actualidad, la principal limitación para el crecimiento de las fuentes renovables convencionales dejó de ser el precio, ya que son competitivas con los combustibles fósiles; ahora es su intermitencia, por lo que la capacidad de almacenamiento de energía se vuelve imprescindible.

• Expansión y modernización de las redes de transmisión. Una red de transmisión moderna y robusta es otra forma de lidiar con la intermitencia de las fuentes renovables no convencionales, pues tal robustez es una condición necesaria para que el sistema eléctrico se beneficie de la complementariedad entre diferentes fuentes renovables.

• Promoción de la digitalización.

• Generación distribuida y respuesta a la demanda.

• Promoción de electromovilidad. Ahora es el momento de explorar oportunidades para aumentar la demanda de electricidad con inversión en estaciones de carga para vehículos eléctricos. Inversiones en pequeña escala, ejecutables rápidamente y con bajo impacto en tarifas.

• Contenido local y cadena de valor regional. 

• Acceso universal a la electricidad.​

Tomado de: BID (María Pérez Urdiales, Claudio Alatorre, Alejandro Rasteletti, Marco Stampini, Mauricio Tolmasquim, Ariel Yépez, Michelle Hallack), El papel de la transición energética en la recuperación sostenible de América Latina y el Caribe. (Nota técnica  del BID: 2142). 



BP: TRES ESCENARIOS PARA EXPLORAR LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA MUNDIAL HACIA 2050​


A inicios de 2022, BP publicó su ya tradicional reporte anual “bp Energy Outlook 2022”, como una contribución al amplio debate sobre los factores que dan forma a la transición energética. En él se analiza las incertidumbres que rodean este proceso hacia 2050, centrados en tres escenarios, los cuales no son predicciones de lo que sucederá o de que a BP le gustaría que sucediera. Más bien, exploran posibles alcances de diferentes juicios e implicaciones sobre la naturaleza del proceso. 

Temas claves
En “Energy Outlook 2022”, primeramente, se identifican 11 aspectos claves de la transición energética comunes a los escenarios planteados, y que proporcionan una guía sobre la evolución del sistema energético en los próximos 30 años.
A continuación, se plasman brevemente estos temas.
 

Evolución esperada de la matriz energética mundial
Los dos primeros escenarios, Accelerated y Net Zero, exploran cómo pueden cambiar los diferentes elementos del sistema energético mundial para lograr una reducción sustancial de las emisiones de carbono. Están condicionados a la suposición de que hay un fuerte endurecimiento de las políticas climáticas que conduce a una caída pronunciada y sostenida de las emisiones de CO2 e. Particularmente, la caída de las emisiones en el escenario Net Zero se ve favorecida por un cambio en el comportamiento y las preferencias sociales que respaldan aún más las ganancias en la eficiencia energética y la adopción de fuentes de energía bajas en carbono. 

Por otra parte, un tercer escenario, New Momentum, está diseñado para capturar la larga trayectoria en la cual el sistema energético mundial viene creciendo. Sopesa tanto el marcado aumento en las aspiraciones globales de descarbonizar de los últimos años y la probabilidad de concreción, como la forma y la velocidad del progreso observado en la última década.​


Escenarios de energía primaria - Exajoules
 





En lo que respecta al gas natural, en los escenarios Accelerated y Net Zero, el consumo de este combustible como energía primaria, entre 2010 y 2050, se proyecta con un TACC de -12 % y  -24 %, respectivamente, mientras que en el New Momentum s​e proyecta un TACC positivo de 9 %.

  

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El rol decreciente de los combustibles fósiles se compensa con la rápida expansión de las energías renovables (eólica, solar, bioenergía y geotérmica). La participación de estas últimas en la energía primaria mundial aumenta de 10 % en 2019 a un intervalo entre 35 % y 65 % en 2050 en los tres escenarios.

Escenarios frente a la emisión de CO2 y el consumo final de energía

Los escenarios expuestos por BP exploran el rango de posibles caminos para el sistema energético global hasta 2050 y ayudan a dar forma a una estrategia resiliente.​